lunes, 12 de diciembre de 2011

diciembre




El 8 de diciembre es tradición armar el arbolito y el pesebre. Ese día ( como si no se pudiese hacer antes o después) hay que correr de acá para allá, bajar las cajas de navidad, cambiar los muebles y adornos de lugar para hacer espacio a la mejor época del año ( y todo en un día!).




Por supuesto que me encanta, así me lo transmitió mi mamá y creo que vale la pena el cansancio y el desorden momentáneo. La casa queda hermosa, más alegre. La foto de arriba es del árbol de mi mamá, el mío es más humilde, no es recogido de la calle, pero sí del incinerador del piso de un vecino que cumple la tradición de cambiar el árbol cada siete años aunque esté en perfecto estado.

Este año recibí un regalo anticipado: mi suegra nos dió el pesebre que era de sus tías y ¡oh casualidad! es del mismo estilo que el de mi mamá, el que yo quería tener.



Y para terminar con más buenas noticias, les cuento que una tía de la familia se recibió de "panadera" luego de hacer un curso en la parroquia de su barrio, y allá fuimos, luego de la misa a la entrega de diplomas y posterior festejo con las cosas ricas que aprendieron a hacer durante el año


Por último, se casó mi hermano este sábado y me gustaría compartir esa alegría con ustedes.

Diciembre es un mes de corridas, apuros, festejos y mucho calor. A veces sueño con una navidad blanca del otro lado del mundo... Espero llegar algún día!

2 comentarios:

  1. Your mothers tree and your recycled tree are both lovely and very warming indeed.

    Teh ceramic angel in pink is very different. You must pack her well when Christmas passes, she seems quite fragile.

    Congratulations to your brother and his bride on their marriage.

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  2. Thanks Shaheen, you always are so kind!

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